Guía turística para Viajar a Irán
Qué ver en la antigua Persia y consejos útiles
Con uno de los patrimonios más espectaculares del mundo, las vacaciones en Irán están lejos del turismo masivo.
¿Es inseguro y por eso no te animas? ¿No conoces a nadie que haya viajado?
¡Basta de prejuicios!
Hace años que los viajes a Irán garantizan seguridad y confort. Los paisajes son diversos, desde los bosques brumosos del norte hasta los desiertos del sur. El país tiene estabilidad política. No hay robos. ¿Acaso es común encontrar, a la entrada de hoteles y restaurantes, plataformas para cargar los teléfonos móviles?
Los iraníes, sin dobles intenciones, quieren invitarte a comer o ayudarte en lo que necesites. No importa si chapurrean el inglés. La hospitalidad brota al instante. Genuina.
Como decía Hafez, su poeta más amado: “Tú eres tu propia barrera. ¡Sáltala desde dentro!”
Sus costumbres invitan a sumergirse en los sitios turísticos. En este artículo descubrirás qué ver en Irán y te llevarás en la maleta varios consejos de viaje. ¡Aprovecha toda la información de nuestra guía turística de Irán!
Lugares turísticos de Irán
Entre las cosas que hacer en Irán, hay que destacar la visita a sus ciudades más importantes y las excursiones a los yacimientos arqueológicos.
Ciudades principales de Irán
Teherán
La ciudad más grande y poblada del país. Cosmopolita. El viaje a Persia comienza en uno de sus dos aeropuertos. No hay necesidad de apresurarse; emprender rápido un tour que te aleje de la capital.
Teherán es el primer acercamiento a la cultura iraní. ¡Vale la pena! La avenida Valiasr baja desde las faldas de la cordillera de Elburz hasta las arenas del desierto. A lo largo de sus 33 kilómetros conecta la ciudad de norte a sur.
Junto a las montañas del norte se alzan mansiones, bulevares, pinos y plátanos frondosos. La avenida desciende como una rampa, y en torno a ella se percibe la globalización y la tradición, la riqueza arriba, y la pobreza abajo. ¿Qué visitar? Los bazares. Las tiendas y restaurantes modernos. Las cantinas frecuentadas por trabajadores. Los museos. La arqueología. Los monumentos.
Al sur, un mundo conservador. Al norte, un poquito de Europa. Todas las mujeres llevan hiyab —el velo que cubre la cabeza—, pero cuanto más atrás, cuanto más cerca del cuello y más caballera a la vista, más pedido de concesiones. Más oposición al régimen.
Hay muchas cosas que ver en Teherán. A 35 kilómetros hay una estación de esquí internacional. Si piensas viajar a Irán en agosto, ¿por qué no aprovechar la nieve y las montañas? Darband Sar tiene pistas a 2700 metros sobre el nivel del mar y es sin duda una atracción turística.
Shiraz
La ciudad de los poetas. Los versos de Hafez y Saadi se siguen entonando junto a sus mausoleos.
Shiraz deslumbra por su tradición artística refinada. Sus jardines. Sus mezquitas. Su riqueza. Sirve de base para conocer Persépolis, una parte ineludible del circuito en Irán. Fue la antigua capital del Imperio persa, y queda a sólo 60 kilómetros.
El jardín histórico de Eram, con un palacio en su centro, fue usado por líderes tribales, primero, y después por la realeza iraní. Es Patrimonio de la Humanidad, y uno de los tantos lugares para visitar en Shiraz.
La ciudad está a los pies de las montañas de Akbar. El río Khoshk trae fertilidad: el césped brota y los árboles brillan con un follaje intenso. El recurso económico principal es el cultivo de la uva.
¿Quieres degustar sus vinos? Con Nubia Tours, nuestra agencia de viajes, organizamos actividades culturales y naturales que van mucho más allá de los circuitos tradicionales. Con nosotros te adentras más y conoces mejor.
La ruta de viaje a Shiraz se centra en los jardines urbanos y los campos de alrededor. Pero en medio de los atractivos turísticos, hay un condimento fundamental: su gente.
Isfahán
La ciudad más bella, repiten algunos turistas, que encuentran al viajar en Irán. Durante el siglo XVI, fue la joya del reinado del sha Abbas I. El gran bazar se hace imponente con los techos abovedados. Para recorrer su arteria principal, puedes hacer el trayecto desde la mezquita del Viernes, la más antigua del circuito a Irán, hasta la plaza del Imán, donde confluyen dos mezquitas y un palacio.
Conoce qué visitar en Isfahán. Los mosaicos azules de las fachadas adquieren otro matiz tras la puesta del sol. Los muros blancos se tiñen de rosa. Muchos de sus jardines son Patrimonio de la Humanidad. Isfahán es la capital cultural del país.
Los musulmanes chiíes conviven y hacen amistad con los cristianos de culto armenio. Ésta es la ciudad más cristiana del país. La cúpula de la catedral es como la de los edificios islámicos.
En homenaje a la comunidad armenia iraní, se construyó el puente histórico Sioseh Pol, con 33 arcadas, como los años de Jesús. El puente es el símbolo de la ciudad, y paradójicamente uno de los símbolos de la nación.
Yazd
En 10 días de viaje a Irán, te recomendamos incorporar a Yazd en tu itinerario. Destaca por su antigüedad y su importancia histórica, pero en realidad es mucho más.
Al tener menos de 500.000 habitantes, el aire es más limpio que en las otras metrópolis. El impacto sonoro es menor. Puedes deambular por sus calles laberínticas y mirar sin prisa el ir y venir de los peatones.
Las casas de adobe conforman la impronta arquitectónica de la ciudad vieja y aportan un microclima para combatir el calor de los desiertos linderos de Lut y Kavir. Hacia allí puedes organizar expediciones.
La religión zoroastriana, originaria de Persia, nació en estas calles hace más de 3500 años. Por estas mismas calles circuló, en el siglo XIII, Marco Polo. Entre los siglos XIV y XV, la comercialización de alfombras y seda la volvió famosa.
Yazd es para caminar, acceder a cualquier rincón andando, e inspeccionar las torres de viento que sobresalen en todo el casco antiguo para refrescar las casas.
Ruinas de Irán
Persépolis
En la antigua capital persa brotan portales inmensos del siglo VI a.C. La fundó el rey Darío, y así lo atestigua la inscripción que hay en la escalera de ingreso a su impresionante sala.
Persépolis forma parte de cualquier guía de viaje a Irán. A diferencia de otras ciudades trascendentales, no fueron esclavos los encargados de la construcción, sino artesanos libres, dispersos por todo el Imperio, que imprimían su estilo al lugar.
Las piedras se alzan monumentales. Crean columnas. Puertas flanqueadas por toros con torso de hombre. Mausoleos en lo alto de la colina. Salones de ceremonia.
Somos especialistas en viajes a Irán. Conocemos cada uno de los hoteles y excursiones que ofrecemos. Traemos la historia al presente y el presente a tus sentidos, como un arte. Es mucho más que observar y escuchar. Es sentir.
Nuestros viajes turísticos a Irán están cargados de pasión. La pasión de Nubia Tours por Oriente Medio. Hace más de 20 años que frecuentamos la región. Contáctanos. No sientas vergüenza. Te ayudaremos a armar un viaje a Irán a medida.
Susa
A 118 km de Ahwaz yacen los restos de Susa. Fue una ciudad poderosa, capital del Imperio aqueménida entre los años 550 y 330 a.C. En ella se construyeron palacios suntuosos y residencias.
Hoy los restos apenas dejan ver el esplendor antiguo. Pero merece la pena adentrarse en su historia. Puedes recorrer la ciudad antigua, conocer el museo de Susa y visitar la tumba del profeta Daniel.
A 50 km se halla Chogha Zanbil. Es uno de los edificios más importantes de la civilización elamita, declarado Patrimonio de la Humanidad. La torre piramidal culmina con un templo en la cumbre. ¡No te lo pierdas!
Ruinas de Tajt-e Soleimán (Trono de Salomón)
Fortaleza de origen aqueménida. El entorno es precioso: se sitúa a 2500 metros de altitud, y la rodea una muralla impresionante con decenas de torres.
Después de los aqueménidas, los sasánidas y los mongoles dejaron su huella. A los primeros pertenece la muralla, el iwan oeste, la sala hipóstila y el templo del fuego.
La sala de asambleas, el fuerte de las diez paredes, el iwan norte y este, y las construcciones al oeste del lago, entre otras dependencias, corresponden al periodo mongol.
A 2 kilómetros hay un volcán apagado con un cráter descomunal, conocido como “Cárcel de Salomón”. ¿Te imaginas acceder, paso a paso, hasta este gran ojo oscuro?
La naturaleza es árida y virgen. Desolada. Pero llena de magnetismo.
Recomendaciones de viaje a Irán
- Tramita el visado para Irán vía online o directamente en el aeropuerto. No te recomendamos pasar por la embajada. Exige tiempo y papeleo innecesarios.
- A finales de marzo es Nowruz, año nuevo iraní. El turismo local se multiplica y los lugares se llenan. Si viajas en esta fecha, reserva hospedaje con antelación.
- La entrada y salida por aeropuertos diferentes te permite aprovechar el tiempo de viaje en Irán, abarcando toda su geografía.
- Ten siempre efectivo encima. Las tarjetas internacionales de crédito y débito no funcionan.
- Aunque la moneda es el rial, muchos dan los precios en tomanes, moneda ya extinta. Es lo mismo, pero con un cero menos. Más vale tenerlo presente a la hora de calcular costos.
- La red de autobuses es confiable y de calidad, pero a veces tiene retrasos largos. Nuestro viaje organizado a Irán optimiza la experiencia con autocar privado.
- Puedes tomar fotos y hacer vídeos sin problemas, salvo en los lugares más santos del país, que exigen la compañía de un guía autorizado. Los monumentos abren de 9 a 17 horas.
- Respeta el código islámico de vestimenta. Las mujeres, incluso en la vía pública, deben ir con la cabeza tapada. Un pañuelo es suficiente.
- Lleva papel higiénico. Suele faltar en los baños públicos.
- Antes de hacer planes para un viernes, recuerda que es día festivo y está todo cerrado.
- Primavera u otoño es la mejor época para viajar a Irán. Buen clima y bajo caudal turístico.
- Los hoteles, para que vayas preparado, suelen ser viejos y descuidados. En nuestros circuitos nos esforzamos por mantener el nivel europeo. Para tener una experiencia de lujo, contrata un viaje exclusivo a Irán.
- A favor del hospedaje: hay wifi y es gratuito. Olvídate de acceder a las redes sociales. Están censuradas.
- No te preocupes por la seguridad. El país vive una época de calma. No hay problemas de frontera y el nivel de delincuencia es mínimo.
Viajes a Irán baratos
La comida y el trasporte públicos, a causa del tipo de cambio, tienen precios muy económicos. Un recorrido en un autobús VIP, 8 horas de viaje, cuesta alrededor de 8 euros.
Viajar a Irán es barato, sobre todo si vas en invierno (temporada baja), cuando hay descuentos en hoteles de hasta el 50%.
Las aerolíneas lanzan vuelos en oferta de noviembre a marzo y de septiembre a octubre.
Asimismo, los vuelos nacionales tienen tarifas low cost. Un trayecto puede costar entre 25 y 50 euros. Mira nuestros paquetes turísticos. Seguramente haya un viaje a tu medida.
Irán, cuna de civilizaciones, recibe de brazos abiertos al viajero. Un país tradicional y moderno te espera. Cuéntanos tus planes. Te ayudaremos a encontrar el viaje más indicado para ti.